Aplicando la
Ley de Atracción
Nuestro universo está regido por diferentes leyes, la Ley de Atracción es una de ellas.
Esta ley nos dice que cada átomo del cuerpo está constantemente respondiendo a los
impulsos del medio ambiente y por supuesto a la mente, a las vibraciones y emociones ya
sean éstas positivas o negativas.
El mecanismo se basa en la intención y la manifestación.Sosteniendo los pensamientos de lo que deseamos
Somos un imán y atraemos hacia
nosotros los pensamientos predominantes. Lo importante es donde focalizamos nuestra mente.
Los pensamientos se vuelven realidad, por consiguiente si somos positivos tendemos a
atraer personas positivas y circunstancias positivas; si de esto se hace un hábito, se
transformará en un estilo de vida.
Asimismo, los pensamientos causan emociones; por ende lo que pensamos debe estar en
consonancia con lo que sentimos y esto atraerá lo que queremos. Lo importante es que si
queremos alcanzar metas positivas, los sentimientos deben ser de respeto, alegría,
comprensión, amistad, amor, unidad.
Si nuestro pensamiento es positivo, pero al mismo tiempo generamos emociones negativas al
respecto (miedo, inseguridad, tristeza); no llegaremos al fin que perseguimos.
Proceso creativo
¿Cómo se trabaja con la Ley de Atracción?
1) Identificar el deseo: Cuando nos encontramos en una situación poco
satisfactoria tenemos que identificar lo que deseamos en su lugar.
¿Cuál es el problema que se plantea
y porqué hay personas que no logran los resultados esperados?
La ley de Atracción responde a nuestros pensamientos y lo que sentimos sobre estos.
La clave esta en concentrarse en lo que queremos, y no en lo que no
queremos, pues de lo contrario se presentarán una y otra vez las mismas circunstancias
negativas.
Tenemos que ser conscientes que somos responsables de lo que sucede en nuestra vida, y por
lo tanto de cambiar los pensamientos negativos en positivos. Se trata de efectuar la
elección ya que de no tener control sobre pensamientos y sentimientos atraeremos muchas
veces por defecto.
Cabe agregar, que los pensamientos positivos son más fuertes ya que nacen de nuestra
propia fuente de bienestar, mientras que los negativos surgen del inconsciente que no es
nuestra naturaleza real.
Para efectuar este trabajo con más precisión, deberíamos efectuar una introspección, y
a través del autoconocimiento, la autoaceptación, confianza, flexibilidad, compromiso y
el pensamiento objetivo; reconocer aquellos sentimientos negativos generados por conceptos
que no condicen con nuestro propio ser; que fueron grabados en el subconsciente por los
mandatos recibidos durante la infancia y adolescencia, y en situaciones adversas vividas;
revertirlos reconociéndonos en nuestra esencia.
Esto debe efectuarse sin enojo, culpa, ira y/o bronca; SI desde el perdón y el
agradecimiento ya que todo fue necesario para nuestro crecimiento y posterior bienestar.
2) Elevar la frecuencia vibracional para alinearla con el deseo: Esto
significa cambiar de enfoque, poner en sintonía pensamientos/sentimientos y humor.
Para ello hay que decidir definitivamente prestar menos atención a los problemas que se
presentan, porque estos son el resultado de la frecuencia en la que estamos vibrando. El
camino es cambiar la vibración.
¿Cómo lo hacemos?
a) En algún momento del día, haciendo cosas que nos causen placer,
felicidad. Sería conveniente elaborar una lista de actividades que nos conecten con la
vida. Ejemplo: estar en familia, jugar con niños o verlos jugar, estar en contacto con la
naturaleza, pasear al perro o acariciar a la mascota, pasear por la orilla del mar,
caminar descalzos por el césped, practicar un deporte, bailar, cantar, pintar, realizar
labores creativas, meditar, escuchar música agradable, etc.
b) Establecer un sistema de control de las emociones, y guiar
los pensamientos sobre la base de como nos hacen sentir. Existen emociones positivas y
emociones negativas, asociadas a pensamientos de igual calificación.
3) Eliminar la resistencia: Esto implica no dudar. Para que los deseos se
cumplan tienen que parecer posibles, creer en ello y sentir que lo merecemos. Hay que
sentir que están por cumplirse porque es lógico que así ocurra.
No sabemos como va a materializarse; pero esto tampoco debe preocuparnos; la preocupación
destruye la manifestación, porque siembra la duda.
Atraemos la forma, con lo que pensamos y sentimos.
4) Aprender a recibir: Cuando aparece la oportunidad, es cuando la
intuición empuja desde dentro; lo que debemos hacer es actuar,
porque este es el momento de recibir lo que pedimos. En ese instante es cuando estamos
preparados para concretar el deseo, no antes ni después. Por lo tanto hay que estar
atentos a lo que sentimos frente a los hechos que se presentan.
¿Cómo sabemos cuando es nuestra
oportunidad?
Manteniendo la atención en lo que pedimos, y sintiendo profundamente que lo tendremos.
Da tu primer paso con fe, no es
necesario que veas la escalera completa, sólo da tu primer paso con fe. Martin
Luther King
La vida esta en constante evolución, lo interesante es que no sabemos cuál es el futuro,
sólo vamos avanzando en pos de aquello que queremos, encaminando nuestro destino. Se
trata de dar el primer paso con fe el resto vendrá naturalmente.
Todo lo que está pasando, está en la
mente. Por lo tanto, todo es natural.
Llevar a la práctica el
proceso creativo
Hasta que la aplicación de la Ley de Atracción se convierta en una habilidad, podemos
comenzar por pedir algo pequeño, ya que la gente suele asociar la realización con el
tamaño de su deseo y no con lo realmente obstaculiza el proceso.
Cuando los primeros deseos dejen de ser una fantasía para transformarse en un hecho,
estaremos en posición de construir mayores fantasías.
Llegado un punto, puede que experimentemos una sensación de estancamiento, producto de no
darnos cuenta que repetimos los mismos pensamientos una y otra vez, por dejarnos llevar
por lo que sentimos frente a lo que observamos; ya sea esto positivo o negativo.
Si miras como lo que es, y
piensas lo que es; atraes más de ello.
Es el caso de la crisis; ella existe, pero si pensamos siempre en términos de crisis,
generaremos más de este estado.
Por lo expuesto, hay que acercarse a lo que es, pero a través de otra posición
estratégica; viendo los sucesos del pasado como tales, y los sentimientos generados como
un producto de las argumentaciones del pasado. Lo que somos es el resultado de esos
pensamientos, para dar vuelta nuestra vida debemos agradecer y crecer.
Otras etapas del proceso
creativo
1- Agradecer: Hacer una enumeración de todo aquello por lo que podamos
estar agradecidos. Todas las mañanas recordemos esta lista y agradezcamos.
¿Porqué es importante hacerlo?
Porque estamos cambiando de dirección el pensamiento y el sentimiento; donde había queja
y lamentos ahora hay gratitud, y esta es la manera de atraer más gratitud a nuestra vida.
2- Visualización creativa: La visualización es el proceso de crear
imágenes mentales de lo que queremos. Cuando visualizamos el pensamiento y la sensación
permanecen, atrayendo la materialización de los sueños.
2.1- Potenciar el proceso de
visualización.
Una de las formas más poderosas que existen para acelerar el logro de cualquier objetivo
es trabajar con su visualización. Cuanto más claras y poderosas sean esas
visualizaciones en las que nos vemos ya con el objetivo alcanzado, más directamente
estaremos mostrando a nuestra mente que es exactamente lo que queremos.
Lo podemos hacer de la siguiente manera:
1- Comenzar creando las imágenes en las que nos vemos con el objetivo ya alcanzado. Crear
imágenes grandes, a todo color y plenas de luminosidad y brillo.
2- Le agregamos todos los sonidos que acompañarán a las imágenes.
3- Sentimos los aromas que estarán involucrados en la escena.
4- Añadimos las sensaciones que nos llegarán a través del tacto.
5- Incorporamos todas las emociones: entusiasmo, felicidad y la satisfacción por el logro
que conlleva alcanzar ese objetivo tan deseado.
6- Permanecer unos minutos viviendo esa experiencia en la mente.
Conclusión
Todo es energía, el pensamiento lo es; por consiguiente tenemos el poder de crear nuestra
propia realidad y nadie puede hacer este trabajo mejor que nosotros mismos; el camino es
sentirnos libres para tomar la decisión con amor y alegría.
Así veremos abundancia en todos los niveles, material, sentimental y espiritual, porque
la creatividad no reconoce límites.
Para atraer este bienestar a nuestra existencia:
1- Hay que mantener una visión clara de la felicidad y paz interior, esto es la base del
éxito. Estar siempre atentos a los pensamientos y su relación con lo que está pasando
en nuestro entorno, ver que condiga con los deseos.
2- Asegurarse primero de que disfrutamos de nuestra propia compañía: Amarnos, tratarnos
como nos gustaría que nos traten. Lo que aprendemos con nosotros mismos luego lo podremos
dar a los demás.
3- Concentrarse en lo positivo de aquellos que nos rodean y no en sus cualidades
negativas. Mantener nuestra propia frecuencia aunque nuestro prójimo no cambie. Recordar
que sólo nosotros creamos nuestra realidad, si activamos nuestro potencial, nada de lo
que este fuera de nuestra frecuencia puede perdurar.
Habremos dominado nuestra vida
cuando la voz interior sea más fuerte que lo que escuchamos afuera, cuando las emociones
estén equilibradas.
No gritar, no enojarse, no tener miedo, no experimentar odio, bronca y/o rencor, que
nuestra posición no sea ni pasiva ni agresiva, pues de ninguna de las dos maneras podemos
ser felices.
Decir la verdad tranquila y sabiamente, actuar siempre desde un comportamiento asertivo.
Recordar estos cinco principios:
Sólo por
hoy no te enojes
Sólo por hoy no te preocupes
Sé agradecido
Trabaja duro (sobre ti mismo)
Sé bondadoso con los demás.
No estamos aquí para cambiar el
mundo sino para elegir el mundo que queremos y permitir que otros también creen su mundo. |