Una propuesta tributaria para el desarrollo
Todos los argentinos tenemos particular expectativa por el nuevo ciclo presidencial que se abre a partir de diciembre de este año, tras las elecciones que tendrán lugar en octubre.
En este año tan especial, en el que festejamos nuestro 70° aniversario, hemos considerado también oportuno relanzar nuestra propuesta de reforma impositiva, porque pensamos que constituye un gran aporte para la próxima administración gubernamental, ya que cualquiera que triunfe en los comicios encontrará indispensable, entre otras cosas y más temprano que tarde, modificar la estructura impositiva.
Para tal fin, en octubre lanzaremos la reedición del libro Bases y lineamientos generales para una futura reforma tributaria -desde el vamos, los especialistas se refieren a él como “el Libro Azul”- con el objetivo de contar con un sistema tributario para el crecimiento, el desarrollo y la distribución del ingreso.
Desde entonces a esta parte, las distorsiones de la estructura tributaria del país, lejos de haberse corregido, se han consolidado e incluso agravado, al punto que se instaló mucho más férreamente entre los economistas de cualquier extracción la necesidad de una reforma. Prueba de ello es que las figuras políticas más encumbradas de la oposición la utilizan como “caballito de batalla” en discursos y debates –ni qué hablar de las organizaciones gremiales-, conscientes del malestar que provoca el actual sistema en gran parte de la sociedad. Sin embargo, los legos en la materia difícilmente tengan una idea clara de la complejidad del problema.
Es por eso que hemos decidido complementar y actualizar nuestro trabajo publicado hace cuatro años, dado el torrente de agua que ha corrido bajo el puente desde entonces.
Consideramos que el problema tributario tiene una complejidad suficiente como para que se escuchen las voces autorizadas de quienes conocemos el tema en profundidad y hemos sumado esfuerzos para ofrecer una propuesta tan profunda como integral. Lo hemos hecho conscientes de su extrema necesidad, tanto entonces como con más razón ahora, ya que el sistema tributario de un país excede las meras necesidades de financiamiento del Estado y se constituye así en una poderosa herramienta para el desarrollo y la equidad social.
Al igual que en la primera versión de “el Libro Azul”, el trabajo fue realizado por un importante equipo de destacados especialistas en la materia, que tuve el honor y el placer de dirigir. En esta oportunidad conté con la coordinación general del secretario del Consejo, Dr. Armando Lorenzo.
Anhelo que esta obra del Consejo sirva para abrir un espacio de diálogo con la fuerza dirigente nacional que emergerá en los próximos meses. Mientras tanto, invito a los lectores a recorrer este número de la revista Consejo Digital, cuyo tema central es el de nuestra 2da. Convención, que no solo ha sido todo un éxito en términos de concurrencia, sino que logró una vez más poner en agenda pública cuestiones que constituyen desafíos estructurales del país.
Una preocupación de la actual gestión del Consejo ha sido, desde el inicio, lograr que la labor de la entidad no se circunscriba solo a la resolución de los desafíos cotidianos del profesional en Ciencias Económicas, sino salir al cruce de las cuestiones estructurales que los generan y hacer nuestro aporte para resolverlas.
