Es imperioso resignificar la educación

Antes de comenzar el año, con mis compañeros de Mesa Directiva, decidimos designar al 2017, en el ámbito del Consejo, como el “Año de la Educación”. Consistentes con dicha línea de inspiración, el próximo 13 de junio desarrollaremos nuestra primera Jornada de Educación, preludio de muchas otras más.

Creemos que fue una decisión muy feliz y oportuna, convencidos de que los argentinos debemos resignificar, de una vez por todas, el rol que le cabe a la Educación para nuestro desarrollo, tanto en lo social como en lo económico.

Es que resulta difícil concebir, a esta altura, que un país que no prestigie la Educación pueda insertarse adecuadamente en un mundo que cambia a un ritmo sin precedentes en la historia de la humanidad. Bajo estas condiciones, la Educación debería tener, ante todo, un carácter anticipatorio y, más que nunca, inquisidor y resolutivo. Precisamos que los niños y los jóvenes de ahora puedan insertarse en el país que los espera como adultos sabiendo resolver los problemas de un mundo que, por su propia dinámica, se torna cada vez más exigente. Desde otro ángulo, ellos tienen todo el derecho a que les demos el instrumental necesario desde las instituciones académicas.

Pero, además de pensar una educación que anticipe los cambios que se afrontan a nivel global -la dimensión “conceptual” de la Educación-, en la Argentina urge fortalecer un sistema escolar que hoy se encuentra perimido, fracturado, con dos niveles distintos y separados: uno con escuelas públicas para pobres y otro con escuelas privadas para quienes puedan pagar. Hay que trabajar para que todo el mundo tenga acceso a la misma educación independientemente de su clase social, y, si bien es un camino largo y sinuoso, debemos ponernos de acuerdo acerca de cómo dar los primeros pasos y marchar con convicción.

No hay que olvidar lo que decía el genial escritor Gilbert K. Chesterton: “la educación es el alma de una sociedad que se transmite de una generación a otra”. Por ello debemos dar a la Educación el lugar que merece hasta desplazar a otros temas de los primeros planos. De lo contrario, si todo sigue como hasta ahora, se ampliará aún más la gran brecha que existe entre ambos sistemas escolares, reafirmando la vigencia de una sociedad fragmentada, lo cual es fatal para la democracia.

Hace tiempo que el Consejo considera a la Educación como uno de los pilares de su actividad, pero este año hemos decidido ir más lejos aún. Desde ya hace muchos años, las distintas conducciones del Consejo consideraron crucial la capacitación de todos sus profesionales, en particular de los más jóvenes. Toda la programación y el desarrollo de la Dirección Académica y del Conocimiento, nuestras Reuniones Científicas y Técnicas (RCyT) y la producción literaria de EDICON dan fe de todo el esfuerzo puesto en darles el valor agregado que precisan los matriculados para descollar en su profesión.

A esta base estructural, que se perfecciona año tras año, en los últimos períodos le hemos agregado muchas otras acciones que nos relacionan con otras instituciones y con futuros profesionales. Permítanme comentarles solo algunas de ellas:

  • - Organización de la "Primera Jornada de Educación". Consideramos esencial  que el Consejo ofrezca a la comunidad un espacio de diálogo, reflexión y aprendizaje sobre la Educación argentina. El martes 13 de junio próximo tendrá lugar este evento con destacados expositores; su lema convocante es “La Educación como eje estratégico para el desarrollo económico y social. De las ideas a la acción: claves y experiencia”. Aspiramos a que, con eventos de este tipo, que por supuesto se repetirán, la Educación vuelva a tener un lugar capital como política de Estado.
  • - Proyecto Belgrano. Consiste en una mesa de diálogo permanente integrada por decanos y representantes de las facultades de Ciencias Económicas y por miembros de nuestra Institución, con el objeto de intensificar las relaciones entre nuestra Entidad y las casas de altos estudios donde se están formando los futuros matriculados. Su propósito es tratar temas de interés común y difundir la importancia de la matriculación no sólo como obligación legal, sino también como sostén para el ejercicio profesional.
  • - Olimpíadas Contables, de Administración y Economía. También en cooperación con las universidades, estas olimpíadas son concursos para estudiantes de esas disciplinas que buscan premiar el esfuerzo de los futuros profesionales a fin de que puedan desempeñarse con éxito en este proceso de cambio que viven nuestras disciplinas en las últimas décadas. Venimos desarrollando las Contables anualmente desde 2010 y ya vamos hacia la octava edición este año, junto con las cuartas Olimpíadas de Administración, y lanzamos las primeras de Economía.
  • - Cursos gratuitos para Jóvenes Profesionales. Ya hace tiempo que nuestra Dirección Académica y del Conocimiento (DAC) imparte una gran variedad de cursos gratuitos dirigidos a este grupo etáreo con el fin de facilitarles una mejor inserción profesional y proyectarles un mejor futuro.
  • - Programas especiales para Estudiantes de Escuelas Secundarias. Comenzamos este año un proyecto que tiene por fin enseñarles los planes de carrera y las distintas alternativas de ejercicio que ofrecen nuestras profesiones. En este marco, se seleccionaron contadores, licenciados en economía, licenciados en administración y actuarios que se desenvuelven en distintas actividades, quienes contaron sus experiencias a una gran cantidad de jóvenes (concurrieron más de 1.200 a esta primera convocatoria), que pudieron recibir una cabal idea de la amplia y diversa actividad que han desarrollado estos profesionales e imbuirse de la importancia que tuvieron sus estudios en el logro de sus objetivos.
  • - Cooperación con el Ministerio de Educación de la Nación. El Consejo viene ofreciendo sus espacios gratuitamente para que dicho organismo desarrolle actividades.

 

Como se podrá apreciar, para el Consejo ha sido siempre primordial la capacitación de sus matriculados, pero supimos también ir más allá: concatenar esfuerzos con las instituciones formadoras de futuros profesionales y poner nuestro granito de arena en pos de revitalizar el rol de la Educación en el desarrollo económico y social del país.