Tres deudas pendientes que la Argentina necesita cumplir

En los últimos meses hubo en nuestro país intensos debates que giraron en torno a problemas estructurales que deben ser atendidos de inmediato por la dirigencia política. Sin embargo, las urgencias electorales usualmente desvían el foco de atención hacia otros aspectos no tan relevantes y a veces banales.

La lista de soluciones necesarias para estos problemas puede ser inmensa, pero hay por lo menos tres aspectos que desde nuestro punto de vista requieren una rápida respuesta: el sistema tributario nacional, la reforma laboral y los cambios en el Código Penal.

En materia tributaria, es dable destacar que en los últimos años hemos perdido tiempo y esfuerzo en cuestiones que no hacían más que complicar el cumplimiento de los contribuyentes. Los cambios no fueron más que meros parches en una normativa de por sí defectuosa.

Conscientes de la situación que nos tocaba vivir, desde el Consejo decidimos aportar nuestro granito de arena con una propuesta que pone fin a las soluciones pasajeras. El denominado “Libro Azul”, elaborado por más de 50 prestigiosos tributaristas de esta Casa, pone al alcance de los legisladores una herramienta de valiosísima ayuda para conocer los defectos y las virtudes de los impuestos nacionales y que intenta servir de base para una reforma profunda. En breve estaremos dando a conocer nuevas publicaciones que intentan darle permanente actualidad a nuestra propuesta matriz.

El segundo aspecto que debe debatirse con seriedad está relacionado con los juicios laborales que impactan negativamente en la vida de las PyME, tema central de este número de Consejo. Hoy, con pocos argumentos, los procesos judiciales se resuelven a favor de los empleados.

Como profesionales en Ciencias Económicas, todos nosotros estamos muy cerca de las empresas y vemos las penurias que esto genera en los empleadores. Los empresarios pierden cualquier caso que llegue a la justicia y las sentencias ponen en riesgo su supervivencia.

Además hay que sumar la problemática de las ART, que está íntimamente relacionada con los inicios de juicios laborales. La suma de estas cuestiones genera contingencias muy importantes, sobre todo para las PyME.

Por último, otro de los temas que a mi juicio merecen un hondo debate está relacionado con la reforma del Código Penal. No hay que pasar por alto que, lamentablemente, la inseguridad se convirtió en una cuestión que afecta a todos los argentinos.

Es por eso que la creación de una comisión especial -que está presidida por el juez Mariano Borinsky y cuyo objetivo es el análisis del sistema actual para aplicar una profunda modificación- es muy alentadora y genera un efecto positivo en la ciudadanía.

Esta oportunidad es importante desde el aspecto impositivo, ya que puede terminar con un viejo reclamo: el de incluir los delitos tributarios como parte orgánica del Código Penal. No hay que olvidar que en la actualidad la Norma Penal Tributaria no es más que una ley especial.

Más allá de las cuestiones abstractas o teóricas, una reforma de este estilo implicará que todas las normas del Código Penal sean aplicables también a esta materia. De esta manera, las garantías y los derechos se reforzarán considerablemente.

Llegó el momento de que la Argentina deje de discutir cuestiones que, aunque necesarias, tienen un impacto efímero. Es tiempo de mirar a futuro y planificar desde hoy el país que queremos mañana.