Mayer: “La Ley de Economía del Conocimiento impactará transversalmente en todos los sectores de la economía”

El Secretario de Emprendedores y PyME de la Nación, Mariano Mayer, afirmó que la aplicación de la Ley de Economía del Conocimiento “impactará transversalmente en todos los sectores de la economía” y que uno de los objetivos es que las empresas alcanzadas tengan un marco tributario que pueda permitirles competir globalmente.

Asimismo, indicó que el surgimiento de la norma fue pensado, principalmente, para las pequeñas y medianas empresas y emprendedores para que puedan desempeñarse en la innovación tecnológica.

 

En una entrevista realizada para esta nueva edición de la Revista, el funcionario profundizó en los puntos clave de la normativa, así como en los beneficios impositivos para las PyME y, además, señaló que “se duplicará el empleo de 215 mil a 430 mil en 10 años”.

 

1) ¿Qué tuvieron en consideración a la hora de impulsar la Ley de Economía del Conocimiento?

Sabemos que nuestras PyME y los emprendedores son el corazón productivo del país y que el principal eje sobre el que debemos trabajar para que se puedan desarrollar es la innovación. 

 

Desde el Gobierno estamos potenciando la agenda de innovación y, por eso, impulsamos la Ley de Economía del Conocimiento. Este sector no sólo es importante por la cantidad y calidad del empleo que genera y sus extraordinarias perspectivas de crecimiento para las próximas décadas, sino que también impacta en todos los sectores económicos: mejora procesos, aumenta la eficiencia, baja costos y genera innovación para todos los sectores de la economía: desde la metalmecánica y la construcción hasta el comercio y los servicios profesionales. No hay sector productivo donde la economía del conocimiento no esté transformando la manera de hacer las cosas y abriendo oportunidades. 

 

Cuando impulsamos este proyecto, siempre lo hicimos sabiendo que en la Argentina el desafío es doble. Por eso, por un lado estamos avanzando en un ordenamiento macroeconómico imprescindible. La necesidad de mejorar la competitividad es una tarea prioritaria y está en el podio de las prioridades de las PyME, pero no podemos dejar de lado la necesidad de trabajar en la agenda de productividad con innovación y tecnología. 


Se busca que las 11 mil empresas alcanzadas tengan un marco tributario que les permita competir globalmente.


2) Con la aplicación de la norma, ¿cuáles son las expectativas de crecimiento de los sectores involucrados?
Primero, resaltar que la Ley va a impactar transversalmente en todos los sectores de la economía, como dijimos anteriormente. Pero, en lo que refiere estrictamente a las actividades que van a poder acceder a los beneficios de la Ley, se busca que las 11 mil empresas alcanzadas tengan un marco tributario que les permita competir globalmente, duplicando en 10 años su cantidad de empleados y multiplicando las exportaciones para que alcancen los u$s15 mil millones en 2030. 
  
3) ¿Cómo se prepara la nueva generación de profesionales ante este cambio? ¿Hay planes de trabajo en conjunto con el Ministerio de Educación para potenciar estas actividades?
Tenemos que abrir la estructura empresarial a esquemas de innovación, fomentando la asociatividad entre PyME y emprendedores, y  vinculando el entramado productivo con el ecosistema científico y tecnológico. Las universidades tienen aquí un rol estratégico en la formación de talento humano, incorporando el espíritu emprendedor e impulsando el desarrollo de nuevos negocios a partir de la investigación aplicada.

El capital humano de la Argentina tiene el potencial de transformar el país en una plataforma mundial para los servicios basados en el conocimiento. Es fundamental potenciar estas oportunidades y avanzar sobre los desafíos para mejorar la competitividad.

 

4) ¿Cómo impactará en las PyME?
Esta es una ley pensada fundamentalmente para todas las pequeñas y medianas empresas, y emprendedores de las actividades de la economía del conocimiento. 

En cuanto a los beneficios, la nueva normativa reduce los costos laborales para el sector, ya que adelanta el mínimo no imponible que la reforma tributaria prevé para el año 2022. Además, otorga un bono de crédito fiscal transferible, equivalente a 1,6 veces las contribuciones que debieran abonarse sobre ese mínimo no imponible. Este beneficio puede utilizarse para cancelar impuestos nacionales, como el Impuesto al Valor Agregado (IVA) o el Impuesto a las Ganancias. Además, contempla una alícuota reducida de Ganancias del 15 por ciento. 

Por otro lado, la Ley estipula que los exportadores que hayan abonado, o se le hayan retenido impuestos similares al Impuesto a las Ganancias en el país destino de la exportación, podrán deducir lo pagado contra Ganancias, obteniendo alivio fiscal y competitividad en los precios de oferta de sus servicios.

También, fomenta la creación de nuevas empresas. A partir de ahora, aquellas empresas con una antigüedad menor de 3 años, y categorizadas como “Micro” en el Registro PyME en una actividad elegible, pueden ser beneficiarias acreditando solamente el 70% de su facturación sin necesidad de cumplimentar otros requisitos.

Por último, entre otros beneficios, la normativa implica una mayor estabilidad fiscal para sus beneficiarios, ya que no podrán ver aumentada su carga tributaria total nacional a partir de la inscripción en el registro y durante toda la vigencia del mismo, incluyendo los derechos de exportación.



Estamos avanzando en un ordenamiento macroeconómico imprescindible.


5) ¿Cómo considera que puede afectar a las empresas de los sectores más tradicionales, cuya actividad principal no sea la tecnología?
Talento tenemos y hay en todo el país. El impacto de la economía del conocimiento es o tiene que ser doble. No sólo que sea de provecho para las empresas de economía del conocimiento, sino que ayude a la transformación digital del resto de los sectores; y será posible ver esos cruces entre los Clusters de Software, tecnología de la información, robótica, o de la industria y la construcción, que son muy virtuosos. Eso es lo que creemos que va a lograr mejorar la productividad de toda la Argentina y permitirnos ser protagonistas del siglo XXI.

 

6) ¿Tiene estimaciones de las exportaciones en los próximos años? El acuerdo del Mercosur con la Unión Europea (UE), ¿puede potenciar estos datos?
A partir del acuerdo Mercosur-Unión Europea se abren grandes posibilidades para las PyME argentinas exportadoras de servicios de alto valor agregado, que van a poder competir en igualdad de condiciones en el mercado europeo. El tratado prevé desarrollar programas que faciliten la integración de las PyME en cadenas globales de valor, proveer asistencia técnica, facilitar su participación en procedimientos de compras gubernamentales y en la transferencia de conocimientos y tecnología. 

 

Por eso, el acuerdo contempla una sección específica destinada a las PyME con el objetivo de alentar su participación en el comercio internacional, ya que cerca del 70% de las empresas que exportan a la UE está constituido por pequeñas y medianas empresas.

 

Bajo el Capítulo de Servicios del Acuerdo, ambos bloques se comprometen principalmente a otorgar a este sector proveedores de servicios, inversores e inversiones de la contraparte un trato no discriminatorio y sin restricciones de acceso a su mercado, en los sectores comprometidos en sus respectivas ofertas y con las limitaciones allí estipuladas. A partir del acuerdo, la  UE ha asumido compromisos de acceso en sectores de interés para la Argentina, como son los Servicios Basados en el Conocimiento (SBC).