La inflación en la Ciudad de Buenos Aires durante el primer semestre de 2020

El objetivo del presente artículo es analizar el comportamiento del Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires (IPCBA) durante el primer semestre de 2020 y compararlo con el mismo período de 2019 y 2018.

El primer semestre de 2020 estuvo influido por el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio¹ desde el día 20 de marzo, como medida preventiva para evitar la propagación de COVID-19. A partir de ese momento, se observó una desaceleración de los precios minoristas, producto del congelamiento de las tarifas de los servicios públicos, la retracción general de la economía y, en menor medida, el control de precios enfocado en los productos que componen tanto el Programa de Precios Cuidados como el de Precios máximos.

 

Nivel General

 

Durante el primer semestre de 2020 el IPCBA acumuló un incremento de 11,9 %, que es la variación más baja en comparación con el mismo período de 2018 (16,4 %) y 2019 (22,7 %).

Las tres divisiones que más incidieron en el incremento semestral del Nivel General fueron: Alimentos y bebidas no alcohólicas, Recreación y cultura, Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles, que en conjunto explicaron el 45,6 % de la variación acumulada del IPCBA. Le siguieron en importancia, Restaurantes y hoteles, y Prendas de vestir y calzado.

En particular, se destacó Alimentos y bebidas no alcohólicas, que tuvo una incidencia de 2,54 puntos porcentuales (p.p.) y alcanzó una variación acumulada de 14,9 % durante el primer semestre.

 

Cuadro 1: IPCBA - Nivel General y divisiones
Variación porcentual acumulada e incidencia acumulada (puntos porcentuales - p.p.-)

 

Durante el primer semestre de 2020, la agrupación que más incidió fue Restaurantes, bares y casas de comidas² , que arrojó una variación acumulada de 12,2 %. Le siguieron en importancia: Prendas de vestir (19,3 %), Gastos comunes por la vivienda (14,6 %), Carnes y derivados (15,7 %) y Verduras, tubérculos y legumbres (35,8 %).

 

Gráfico 2: IPCBA - Recreación y cultura
- Incidencia acumulada -

• Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles

Dentro de esta división se destacaron por su incidencia: Gastos comunes por la vivienda y Alquiler de la vivienda, que en conjunto explicaron el 9,3 % de la variación semestral del Nivel General de 2020. Cabe destacar que, a diferencia de otros años, no hubo incrementos en las tarifas de los servicios públicos (electricidad, gas de red y servicio de agua corriente).

 

Gráfico 3: IPCBA - Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles
- Incidencia acumulada -

Le siguieron en importancia:

 

• Restaurantes y Hoteles: se destacó la incidencia de Comidas lista para llevar (Ver Nota al pie N° 2).
• Prendas de vestir y calzado:dentro de la división, tuvieron mayor incidencia las Prendas de vestir, especialmente las de mujer y hombre.

Bienes y Servicios

Durante el primer semestre del año, los Bienes acumularon un incremento de 14,2 % y los Servicios, 9,8 %. A diferencia de los primeros semestres de 2018 y 2019, los Bienes se ubicaron por encima de la variación de los Servicios y del Nivel General.

 

Cuadro 2: IPCBA - Bienes y Servicios
  - Variación porcentual acumulada -

Si se analizan por separado los dos primeros trimestres, se observa que la desaceleración de la agrupación Servicios en el segundo trimestre fue la principal responsable de la desaceleración del Nivel General, debido a los efectos del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, y el congelamiento de las tarifas de los servicios públicos.

 

Cuadro 3: IPCBA - Bienes y Servicios
  - Variación porcentual acumulada –

Los aumentos en las tarifas de servicios públicos tienden a concentrarse en momentos puntuales del tiempo y tienen doble impacto en los precios de la economía; es decir, un impacto directo sobre las tarifas que paga el consumidor y un “efecto de segunda ronda” o “efecto contagio” en el resto de los precios (por su incidencia directa en los costos). Es decir que un ajuste de tarifas posiblemente tenga efectos potenciales sobre otros precios de la economía. Por ende, pareciera existir una relación de corto/mediano plazo entre los aumentos de tarifas y el resto de los productos.

Analizando la evolución de los índices de Alimentos y bebidas no alcohólicas y Electricidad, gas y otros combustibles, se observa que, si bien las tarifas de los servicios (electricidad y gas) se encuentran congeladas desde mediados de 2019, los alimentos y las bebidas no alcohólicas continuaron incrementándose. Esto muestra la brecha actual entre ambas trayectorias y alerta sobre los posibles efectos directos y de segunda ronda que se puedan generar ante los postergados ajustes tarifarios.

 

Gráfico 4: IPCBA - Alimentos y bebidas no alcohólicas y Electricidad, gas y otros combustibles
  - Índices base Enero 2018=100 –

Estacionales, Regulados y Resto IPCBA ⁴

Durante el primer semestre de 2020, la mayor variación acumulada la registró la agrupación Estacionales. Posiblemente ocurrió por la imposibilidad de reflejar la estacionalidad en los servicios relacionados con el turismo, dadas las restricciones que se establecieron por el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio.

 

Asimismo, la variación acumulada de la agrupación Regulados alcanzó una variación acumulada mínima en relación con los otros períodos analizados, reflejando el congelamiento de las tarifas de los servicios públicos.

 

Cabe destacar que, si bien la agrupación Resto IPCBA acumuló una variación inferior en el primer semestre del 2020 en relación con 2018 y 2019, se ubicó por encima de la variación acumulada del Nivel General.

 

Cuadro 4: IPCBA - Estacionales, Regulados y Resto IPCBA
- Variación porcentual acumulada –

La brecha entre las variaciones acumuladas semestrales de 2020 de la agrupación Regulados y Resto IPCBA, nuevamente, alerta sobre los posibles efectos (directos y de segunda ronda) y la presión que podría ocasionar sobre los precios minoristas, los postergados ajustes tarifarios en electricidad, en gas y en el resto de los productos regulados (telefonía fija, combustibles, servicio de agua corriente, peajes, entre otros).

 

Frecuencia de cambio: porcentaje de observaciones que aumentaron

La frecuencia de cambio se calculó como el porcentaje de observaciones reales que, para cada período (mes), mantuvieron los precios sin cambios, aumentaron los precios y bajaron los precios. En este caso, solo analizaremos el porcentaje de observaciones que subieron (aumentaron) los precios.

 

 

Analizando el primer semestre de 2020, en el mes de enero se observó un porcentaje mayor de las observaciones acerca de que aumentaron los precios en comparación con los dos años previos. Sin embargo, a partir del establecimiento del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio, dicho porcentaje comenzó a disminuir fuertemente alcanzando niveles mínimos y estables respecto a los primeros meses del semestre y a los años anteriores bajo análisis.

 

Si nos centramos en la división Alimentos y bebidas no alcohólicas, la tendencia es similar a la observada en el Nivel General.

 

Observaciones para destacar

Es posible concluir, bajo lo señalado en las secciones anteriores, que el primer semestre de 2020 presentó una variación acumulada anual menor en comparación con los dos años previos. Esto último estuvo fuertemente influenciado por los efectos que tuvo el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio sobre la dinámica y la evolución de los precios (principalmente en los servicios). La fuerte desaceleración también se pudo observar en el comportamiento que presentó el porcentaje de observaciones que aumentaron en el segundo trimestre con respecto al primer trimestre del 2020.

Como se mencionó anteriormente, la desaceleración de los precios minoristas, producto del congelamiento de las tarifas de los servicios públicos, la retracción general de la economía y, en menor medida, el control de precios enfocado en los productos que componen tanto el Programa de Precios Cuidados como el de Precios máximos ayudaron a mantener contenido el incremento de los precios del segundo trimestre de 2020 y, en consecuencia, el del semestre.

Es importante destacar que, a mediados de julio de 2020, se implementaron actualizaciones en los programas de Precios Cuidados y de Precios máximos que tuvieron impacto en el relevamiento de precios de varios productos del IPCBA. Esto último, junto con una paulatina reapertura de la economía, las postergadas actualizaciones en las tarifas de los servicios públicos y en el resto de los regulados, y los efectos directos y de segunda ronda de dichos ajustes, posiblemente ocasionen una presión alcista en los precios minoristas y reviertan la tendencia que se observó durante el primer semestre del año.

---