En 1958 se creó el Ministerio de
Economía y la carrera de Licenciado en Economía en la Universidad de Buenos Aires. Este
año se cumplen medio siglo de ambos hechos.
A la hora de hacer un balance es posible decir muchas cosas. La menos original es que el
país tuvo 54 ministros de Economía en esos 50 años, dato elocuente en sí mismo. Y que,
si no fuera por el período que va desde los 60 hasta mediados de los 70 y también
el período 2003- 2008, probablemente la economía argentina se hubiera mantenido
estancada.
Pese a ese triste récord, la carrera de Economía fue logrando imponerse con los años.
De alguna forma u otra, los acontecimientos económicos han logrado cautivar la atención
de El desempeño de la matrícula de los economistas no condice con la performance
económica. Mientras una sube, la otra permanece estática. Pero quizás cuanta más
crisis haya, serán numerosos quienes se interesarán por la economía y se formarán más
economistas. Para algunos, esto se convierte en un círculo vicioso peligroso porque más
economistas significan más crisis.El nacimiento
Antes de 1958, la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires
había cumplido 40 años con hegemonía de la carrera de Contador Público. Había
oposición a nuevos planes de estudios. Según testimonios en revistas de la época, las
autoridades veían claramente la separación de las carreras como un recorte de su campo
profesional. En esa línea, la Licenciatura en Economía Claro que los que pedían
reformas eran profesionales reconocidos. En 1945, el ex presidente del Banco Central,
Raúl Prebisch, reclamó por la falta de economistas y la oportunidad de generarlos. El
historiador económico Manuel Fernández López recuerda su propuesta de reformar los
planes de estudios y enviar a perfeccionarse en el extranjero a los estudiantes y
egresados más capaces. Pero lo primero era separar las carreras: contador,
economista y actuario, comenta. La salida de Prebisch de la UBA (1948) privó del
mayor sostén a reformas que hubieran anticipado en dos décadas los estudios económicos,
y también de una generación de economistas más ilustrados. Lo cierto es que
transcurrieron diez años antes de ver nuevos avances.
Tres carreras de Economía se crearon en 1958. Primero, el 7 de marzo, el Episcopado
argentino declaró oficialmente fundada la Universidad Católica Argentina (UCA) con una
facultad de Ciencias Sociales y Económicas que ofreció la carrera de economista.
Después, el 17 de marzo, la Universidad Nacional del Sur (UNS) aprobó la Licenciatura en
Economía y se convirtió en la pionera entre las universidades nacionales. El plan
comprendía 28 asignaturas y 5 seminarios: Introducción a la Economía, Teoría del
Precio, Moneda y Crédito, Economía Internacional, Fluctuaciones Económicas, Política
Económica, Economía Social, Economía Agrícola, Economía de los Transportes, Historia
del Pensamiento Económico, Finanzas, Política Financiera y un seminario de Econometría.
En Buenos Aires
Por último, llegó el turno de la UBA. en octubre de 1958, la Comisión de Plan de
Estudios de la FCE (UBA), formada por Rosa Cusminsky, William Leslie Chapman, Elías A. De
Cesare, Guillermo Díaz, Enrique García Vázquez, Alfredo Arturo OConnell, Enrique
Reig y Héctor Wencelblatt, entregó su informe sobre la creación de la Escuela de
Economía Política en la FCE, con grado habilitante de Licenciado en Economía Política.
El 13 de noviembre, el Consejo Superior de la UBA aprobó la creación de la Escuela de
Economía Política. El plan de estudios era similar al de la UNS, pero Economía Agraria,
Economía de los Transportes y Econometría eran cursos optativos, en tanto Teoría del
Crecimiento Económico y Sistemas Económicos Comparados eran obligatorios.
Las nuevas carreras dieron Olivera, Francisco Valsecchi, Felipe Tami, Norberto González,
Federico J. Herschel, Samuel Itzcovich, José María Dagnino Pastore, José Gomariz,
César Piana, Héctor Grupe, Camilo Dagum, Aldo Ferrer, Oreste Popescu, Benjamín Cornejo,
Guido Di Tella, Alberto Fracchi, Javier Villanueva, Eduardo Zalduendo y otros.
Estudiantes de Contador Público de la UBA como Miguel Sidrauski y Héctor Diéguez
se vieron atraídos en 1959 por la Licenciatura en Economía, hallando en Olivera una
guía, apunta el historiador. Ese mismo año, el 22 de julio, al cumplirse el
décimo aniversario del fallecimiento del ingeniero Torcuato Di Tella, fue creado el
instituto que llevaría su nombre con un Centro de Investigaciones Económicas, pero que
comenzó a funcionar en 1960.
Ministros
En cuanto a los ministros de Economía, los hubo de todo tipo. Los que pasaron por el
cargo más de una vez (Álvaro Alsogaray, José Alfredo Martínez de Hoz, Roberto
Alemann), los que no volvieron nunca más (Juan V. Sourrouille), los que duraron cinco
años (Domingo Cavallo), los que estuvieron cinco días (Ernesto Corvalán, con Isabel
Martínez de Perón), los que renunciaron (José Luis Machinea), los que se hicieron echar
(Roberto Lavagna) y hasta aquellos a los que echaron (Martín Lousteau). Los hubo
fanáticos de los planes económicos y talibanes del piloto automático (no hagamos
nada, que el mercado resuelva todo). Los que sin anestesia decían hay que
hacer un ajuste y los que delicadamente tiraban hay que pasar el
invierno. Entre ellos hubo muchos ministros que ni siquiera eran licenciados en
Economía. |