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Consejo Nº 5 - Noviembre 2008

Entendiendo la crisis
10 claves para explicar los principales acontecimientos del año que se va y del que está por comenzar

¿Qué pasará con el dólar? ¿Ya pasó lo peor de la crisis? La inflación, la economía de Estados Unidos, las commodities. Los principales acontecimientos del año que se va y del que está por comenzar.
1. El Dólar:
Esa vieja obsesión de los argentinos

Lorenzo Sigault dijo: “el que apuesta al dólar pierde”. Y ganaron todos (los que apostaron al dólar, claro). Este año volvió esa vieja timba: todos compran dólares porque piensan que hoy está muy barato y mañana el Gobierno no podrá sostenerlo. Pronósticos hay para todos los gustos: Miguel Angel Broda, Ricardo Arriazu, Fiel y el Citibank lo ven para fin de 2009 a más de $4. El argumento detrás de este pronóstico es que si el Gobierno no devalúa entonces no tendrá exportaciones suficientes que le dejen divisas y recaudación en concepto de retenciones. Por otro lado, economistas como Miguel Bein o Mario Blejer dicen que no, que el actual nivel está bien y que en todo caso podrá subir unos centavos más, pero no habrá una devaluación del 100%.


La realidad es que nadie puede saber a cuánto estará el valor del dólar. Y tal vez ése sea el principal interrogante para 2009.

2. Inflación:
De cuco a ninguneada
¿No lo recuerdan? Sí, señor: a principios de año todos estaban desesperados por la inflación. Todas las encuestas decían que era la principal preocupación de los argentinos. Hoy ya no (son otras, en realidad).


El ex ministro de Economía Martín Lousteau anunció en marzo un esquema de retenciones móviles sobre los granos con el objetivo de brindar estabilidad en los costos sobre la cadena de alimentos. Fue el gran dolor de cabeza del Gobierno. El plan no solamente no fue bien recibido por la oposición, sino tampoco por la gente en general. Encima la inflación continuó subiendo hasta llegar al 30% anual. La presión se hizo insostenible y a Lousteau no le quedó otra cosa que renunciar.


Pero, volviendo al tema precios, ¿qué fue lo que sucedió para que la inflación ya no sea más la principal preocupación de la gente? Simplemente que la Argentina ya no crece a tasas chinas y ello sin duda ha servido para disciplinar el ritmo al que los precios crecían. Y todo indica que seguirá ocurriendo lo mismo el año que viene. “La inflación en 2009 será similar a la de este año, cerca del 18% de la mano de una economía al borde de la recesión”, pronostica el economista Miguel Ángel Broda.


El relevamiento de los precios de los alimentos y de las bebidas que realiza periódicamente la consultora Finosoport mostró una significativa desaceleración de la tasa de inflación de este rubro durante el mes de octubre. De hecho, ese guarismo se redujo desde 0,9% en septiembre a 0,2% en octubre. En este último mes, y después de más de un año, los pronósticos de los economistas privados y el INDEC coinciden en cuanto a la inflación (no así en materia de desempleo y actividad).

3. Las AFJP vuelven al Estado
El Gobierno logró una reforma estructural: que la administración de los fondos de jubilación y pensión vuelva a manos del Estado. La oposición criticó duramente la medida. La tildaron de oportunista y de acaparar los recursos necesarios para encarar el proceso electoral de 2009. El Estado tendrá activos por $ 80.000 millones gracias al dinero acumulado por los aportantes en sus cuentas individuales. Por otro lado, recibirá un flujo anual de ingresos de $15.000 millones por los montos que los trabajadores activos aportaban a una AFJP. Asimismo, asumirá un pasivo a futuro (el pago de las jubilaciones).


Aquellos que el año pasado optaron por quedarse en el régimen de capitalización (el año pasado se permitió que los afiliados de ambos sistemas decidieran dónde querían estar: el 85% optó por seguir en el sistema privado) ahora serán trasladados automáticamente.

4. El año de las commodities récord
Hoy existe gran incertidumbre sobre el precio futuro de los productos básicos. Si continúan descendiendo respecto a los niveles de principios de 2008, puede ser positivo porque entonces las poblaciones tendrán acceso a las viviendas, los alimentos y los combustibles a un costo menor. Pero, si, a su vez, la corrección sigue siendo brusca como en los últimos meses, el pánico podría aumentar.


El escenario más realista es uno intermedio. Distintos organismos nacionales e internacionales, como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, la Agencia Internacional de Energía y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos coinciden en que la demanda global de productos básicos continuará siendo alta en los próximos años, pero que en 2008 se llegó a un récord.

5. 2008: Odisea en el espacio (financiero)
El año 2008 ya es un mojón en la historia de la globalización. Es el año en el que se rompe la favorable tendencia del ciclo económico de más de cinco años a causa de fuertes turbulencias, cuyos orígenes se encuentran en la etapa previa de prosperidad.


Los puntos más salientes del proceso fueron: el estallido de la crisis de las hipotecas de alto riesgo, que comenzó en 2007 en los Estados Unidos y amenaza con una recesión en la economía de ese país y del mundo; el debilitamiento del dólar y los movimientos especulativos con las commodities; los coletazos de la crisis de las hipotecas de alto riesgo.

6. Cómo se desató la crisis internacional
La crisis de las hipotecas de alto riesgo es un caso de burbuja inmobiliaria en Estados Unidos que, al reventar, afectó a las instituciones financieras que tenían más cantidad de activos respaldados en el pago de esas hipotecas. Las pérdidas de tales operaciones elevaron la deuda y redujeron el capital de esas instituciones, limitando su capacidad de atender las necesidades crediticias de la economía. Ante esta situación, procedieron a vender activos, acentuando la caída de los precios de los activos y, por ende, sus propias dificultades de deuda y capital. Esa espiral descendente desató la desconfianza entre los propios bancos, lo que produjo una contracción del crédito y propició las condiciones para la quiebra de gigantes financieros (Lehman Brothers) comprometidos de manera imprudente con operaciones demasiado riesgosas y con financiamientos a corto plazo. En tal momento, la intervención del Estado se transformó en un requisito indispensable para restaurar la confianza y restablecer la normalidad de los flujos financieros.

7. ¿Ya pasó lo peor de la crisis internacional?
Para muchos especialistas, sí. Otros (tal vez más honestos) dicen “no se sabe”: la modalidad de operaciones fuera de balance que caracterizó el accionar de los bancos de inversión hace difícil proyectar la profundidad y la duración de la crisis.


Por de pronto, es necesario que termine de desinflarse la burbuja inmobiliaria para que los precios del conjunto de los activos contaminados vuelvan a niveles sustentables. Sólo entonces se conocerá con precisión el volumen de las pérdidas.


Estos procesos no son breves. De allí la magnitud del paquete de rescate del sistema de 700.000 millones de dólares propuesto por la administración estadounidense para restaurar la confianza y asegurar la continuidad de la cadena de pagos para evitar la quiebra de empresas y agencias financieras bien administradas. Hoy, con un nuevo gobierno a meses de asumir, se sabe que su principal prioridad será la economía.

8. Estado Unidos, Brasil y la Argentina en 2009
La Argentina exporta a Brasil el 18% de sus ventas al mundo. Y según JP Morgan y el FMI, el crecimiento de la economía brasileña se reducirá a la mitad el año próximo al pasar de 5% a 2,5%, por lo cual es probable que la Argentina coloque menos producción en el país vecino. Lo importante es qué evolución tendrá la economía de Estados Unidos, hoy en recesión. Continuará así hasta por lo menos el segundo trimestre de 2009. Como el dólar seguirá en alza en todo el mundo (esto es, se revaluará), las exportaciones de ese país no crecerán y además se debilitarán las importaciones. Por lo tanto, el comercio mundial se enfriará.


Como los gobiernos y el público en general se refugian en el dólar cuando hay una crisis, la demanda de divisas aumentará.

En este contexto, algunos países están perdiendo reservas internacionales y sufriendo algunas corridas en los mercados de cambio. Brasil enfrentará un deterioro en el resultado del balance de pagos porque se dificultarán las ventas de bienes al principal socio comercial (Estados Unidos). Por lo tanto, el Banco Central de Brasil (BCB) deberá tomar una decisión trascendental: vender reservas internacionales y achicar el crédito interno, o dejar que la moneda (el real) siga perdiendo valor incesantemente. Si el BCB optase por dejar que el tipo de cambio siga subiendo, la competitividad de las exportaciones argentinas disminuirá aún más y se reducirá el superávit de la balanza comercial argentina.

9. Las economías BRIC desafiadas
Durante 2003-2007, la economía mundial vivió el mejor ciclo de los últimos 40 años al registrar elevadas tasas de crecimiento, baja inflación, bajas tasas de interés, financiamiento fluido y un comercio internacional en expansión. Casi la mitad del incremento económico mundial correspondió a los grandes países emergentes: Brasil, Rusia, India y China. Goldman Sachs los bautizó con el nombre de BRIC.

Ese favorable escenario internacional, sumado a la mejor calidad de las políticas macroeconómicas de la región, explica el mejor desempeño económico de América Latina y el Caribe en cuatro décadas. A esa buena performance contribuyó también la alta demanda mundial de energía, alimentos y otros productos básicos, que impulsó las exportaciones de la región.

10. El año que fracasó DOHA
Durante 2008, la Ronda de Doha transitó desde un razonable optimismo hacia un significativo estado de incertidumbre, producto del fracaso de la reunión miniministerial convocada por el director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Pascal Lamy, en la última semana de julio. Esta ronda de negociaciones es especialmente relevante, pues es la primera que tiene lugar desde el término de la Ronda Uruguay del GATT, celebrada en diciembre de 1993, 15 años atrás. Para los países en desarrollo, la Ronda de Doha conlleva la posibilidad de reponer la dimensión del desarrollo en la agenda del comercio internacional; de ahí deriva su nombre: Programa de Doha para el Desarrollo.


El fracaso de la reunión miniministerial de julio de 2008, marcada por las discrepancias entre China, los Estados Unidos y la India, creó incertidumbre respecto de la capacidad de los protagonistas responsables de las negociaciones -beneficiarios del proceso de globalización- de otorgarle gobernabilidad al sistema multilateral de comercio.


La Argentina no obtuvo un buen resultado en Ginebra y mantuvo una posición contraria a la de su país vecino, Brasil.

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