Sector Externo


Situación

A raíz principalmente de la desaceleración económica brasileña y de las devaluaciones en el sudeste asiático, estaría ya comenzando un período en que aumentaría el déficit comercial del país, por la vía de menores exportaciones —especialmente de productos manu- facturados de origen industrial— y una mayor presión de las importaciones.

La devaluación de las monedas del sudeste asiático —incluido Japón— y de los países europeos con respecto al dólar estadounidense, viene erosionando significativamente la competitividad de los productos argentinos.

En un contexto que incluye la difundida presencia de cupos de importación —mecanismo aceptado de protección— en los países industrializados, la Organización Mundial de Comercio exigió a la Argentina el levantamiento de derechos específicos —mecanismo protector muy vulnerable— a la importación de productos textiles, medida que será oficialmente apelada.


Perspectivas

Existe un significativo grado de incertidumbre sobre, al menos, los niveles que tomarán en los próximos meses las tasas de interés que deben afrontar los sectores público y privado en su endeudamiento con el exterior.

El corriente año cerrará con un saldo negativo del balance comercial algo superior a los u$s 4.000 millones —considerando las importaciones a valor CIF—, que sumado al creciente déficit por servicios financieros y reales, arrojará un déficit de la cuenta corriente externa del orden de los u$s 10.000 millones.

Después de la reciente aprobación de un protocolo marco para la negociación de una liberalización del mercado de servicios —en un plazo máximo de 10 años— en el ámbito del MERCOSUR, importará la reunión que este bloque mantendrá en febrero con el Pacto Andino, con vistas a una futura asociación.