Economía Internacional
Situación
Las reducciones de tasas de interés en Estados Unidos y varios países industrializados, el aporte de nuevos fondos al FMI, el programa japonés de saneamiento de su sistema financiero y la ayuda económica acordada a Brasil, han configurado una notoria recuperación en el escenario de la crisis internacional y han evidenciado un papel más activo de las potencias económicas.
A mediados de noviembre se anunció el otorgamiento a Brasil de una ayuda económica por u$s 41.550 millones -conformada por el FMI, el BM, el BID y un conjunto de países- en apoyo de su programa de ajuste fiscal y reformas institucionales, casi simultáneamente con una baja dispuesta por el gobierno de la tasa de interés de referencia, la cual no satisfizo todas las expectativas.
La Cuarta Conferencia sobre Cambio Climático mostró un escaso progreso en sus resultados, habiendo decidido un plazo máximo de dos años para definir los mecanismos de aplicación del Protocolo de Kioto -firmado en diciembre de 1997- sobre reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
El ajuste fiscal en Brasil
El ministro de Hacienda brasileño anunció el 28 de octubre el “Programa de estabilidad fiscal”, integrado por un plan de acción y una agenda de trabajo sobre reformas institucionales.
El plan de acción incluye para 1999 la reducción de los gastos antes incluidos en el presupuesto en u$s 7.310 millones -un 17,3% del gasto total anterior- y una menor inversión de las empresas públicas por 2.270 millones.
Se prevén recortes presupuestarios levemente crecientes en el 2000 y 2001.
Las medidas proyectadas para elevar la recaudación tributaria incluyen:
aumento de la tasa de la “contribución provisional sobre movimientos financieros” (impuesto al cheque) a partir de 1999, de 0,25% a 0,38%, descendiendo a 0,3% en el 2000;
aumento de la tasa de la “contribución para fines sociales” -que las empresas pagan sobre sus ganancias-, de 2% a 3%, y extensión de esta contribución a las entidades financieras;
incorporación al Estado, como administrador temporal, de los recursos que los jueces ordenan depositar a los contribuyentes en procesos por evasión impositiva.
El plan incluye como medidas para reducir el déficit de la seguridad social, la generalización de una tasa de 11% como contribución al sistema de los empleados públicos, tanto activos como inactivos, y la imposición por 5 años de un impuesto adicional con igual destino de 9% a los empleados públicos activos e inactivos que perciban más de u$s 1.000.
Considerando los efectos del programa de estabilidad fiscal, el Gobierno tiene los siguientes objetivos y perspectivas:
reducción del gasto público en u$s 12.600 millones y aumento de la recaudación en 10.900 millones durante 1999, resultando un esfuerzo fiscal de 23.500 millones y previéndose niveles superiores para el 2000 y 200l por mayores recortes del gasto y menores incrementos de la recaudación;
superávit primario del sector público -antes del servicio de la deuda- de 2,6% del PBI en 1999 y levemente superiores en los dos años siguientes;
baja de la tasa de interés anual, de 42,4% a 22% a mediados de 1999, a 17% en el 2000 y a 15% en 2001;
crecimiento económico de 0,5% en el año actual, de -1% en 1999, de 3% en el 2000 y de 4% en 2001.
Las reformas institucionales
La citada “agenda de trabajo” comprende las siguientes reformas:
reglamentación de la reforma de la administración pública -ya aprobada por el Congreso-, que permite despidos de personal;
reglamentación de la reforma del sistema de previsión social -ya aprobada por el Congreso-, que limita la edad mínima de jubilación y aumenta los años de trabajo requeridos;
proyecto de ley general de previsión pública, para reducir el déficit gubernamental por el pago de jubilaciones a empleados públicos;
proyecto de ley de reforma tributaria, tendiente a facilitar el sistema impositivo del país, que gravará principalmente el consumo y no la producción;
proyecto de ley de reforma laboral, destinado a reducir el costo laboral y facilitar la negociación directa entre empresarios y trabajadores;
proyecto de ley de responsabilidad fiscal, para impedir que los gobiernos estaduales y municipales gasten más de lo que recauden;
proyecto de ley de reforma del fisco fe-deral, destinado a aumentar los poderes del erario;
proyecto de ley de reestructuración del plan plurianual y de la ley de presupuesto, tendiente a un mayor control del gobierno central sobre el destino de los recursos presupuestados, y
liberalización del sector de combustibles, destinada a cesar la intervención estatal y a eliminar todo tipo de subsidios.
Perspectivas
La evolución de la economía brasileña en el futuro inmediato estará signada principalmente por la variación de su nivel de reservas internacionales, el tratamiento legislativo del programa de estabilidad fiscal y el movimiento de la tasa de interés de referencia, esta última relacionada con su abultada deuda pública interna.
Importará en los próximos meses el avance que se vaya observando con respecto a la necesidad -expresada por el director gerente del FMI- de “reformar el sistema financiero y monetario internacional para minimizar el riesgo de que vuelvan a ocurrir crisis sistémicas y para que cuando se produzcan crisis aisladas, recibamos una advertencia rápida y tengamos mecanismos efectivos y recursos adecuados para asistir a los países en crisis”.