Sector Agropecuario

Situación

Una interesante recuperación de los precios de los cereales ha tenido lugar en el mes de agosto. La más significativa correspondió a la soja, que en el mercado local llevó en dos meses la posición mayo del 2000 de $ 154 la tonelada a los $ 170 vigentes a mediados de setiembre.

En su reciente reunión en Buenos Aires, el Grupo Cairns produjo una declaración conjunta -con vistas a la próxima Ronda del Milenio de la OMC-, denunciando la política de subsidios de Europa y Estados Unidos, incluyendo las nuevas formas que la misma reviste últimamente.

La organización gremial representativa de los productores más pequeños lanzó un paro de tres días, desde el 13 al 16 de agosto, al tiempo que las restantes entidades sectoriales optaban por no plegarse a la medida.

Los aprontes para la Ronda del Milenio

Es innegable el tremendo perjuicio que sobre los países en desarrollo de base agrícola produce la pólítica de diferenciación que practican los países que integran la OCDE en el sistema multilateral de comercio, al darle al sector agropecuario un status especial -que lo diferencia del resto de los sectores productores de bienes transables inter- nacionalmente-, en nombre del cual practican una política de elevados niveles de protección a la producción interna, aplican subsidios a las exportaciones de bienes muchas veces obtenidos gracias a esa protección y restringen el ingreso a sus fronteras de bienes producidos en otros países.

La Ronda Uruguay del GATT, con sus múltiples deficiencias y debilidades significó un avance importante, sobre todo en dos aspectos: el haber instalado el tema agrícola y la necesidad de su gradual liberalización en el sistema multilateral de comercio, y el haber generado algunas habilidades de negociación y capacidad de aprendizaje por parte de los países menos poderosos, además de obviamente la sanción de una importante cantidad de instrumentos regulatorios y normas que antes no existían para la agricultura, como las medidas compensatorias y las normas de solución de controversias. Pero no pudo eliminar los subsidios.

El Grupo Cairns es un conjunto de 15 países (además de la Argentina, Canadá, Australia, Fidji, Filipinas, Brasil, Chile, Colombia, Indonesia, Malasia, Nueva Zelanda, Paraguay, Sudáfrica, Tailandia y Uruguay) que aun cuando de muy disímiles características, no protegen (o lo hacen en bajos niveles) a la agricultura y que se plantean como objetivo común reducir el proteccionismo agrícola y la supresión de las barreras al comercio internacional. El Grupo ha realizado en Buenos Aires, en el mes de agosto, su XIX Reunión Ministerial, con el objeto de definir las pautas para participar como bloque en las negociaciones de la Ronda del Milenio, a iniciarse en Seattle, el 30 de noviembre próximo, para lograr la eliminación concreta de los subsidios a la agricultura bajo las distintas formas, coberturas y excusas que éstos adopten.

Los fuertes y precisos contenidos de la declaración conjunta fueron importantes, porque la heterogeneidad existente entre los países del bloque podía ponerse de relieve en estas circunstancias cuando los bajos precios agrícolas hacen más acuciante la necesidad de ayuda a los productores, así como más evidentes las distintas capacidades y vocaciones de los países para concretar esa ayuda poniendo en peligro la unidad del bloque. Sin embargo, el acuerdo surgió fluidamente, con menciones a cuestiones de la mayor relevancia, como el tema de la “multifuncionalidad”, nuevo caballito de batalla con el que la Unión Europea intenta justificar la ayuda interna con argumentos de arraigo de población, calidad del paisaje, conservación de las tradiciones, etc., que fue abordado como “...una cortina de humo para las políticas proteccionistas que perpetúan la pobreza, el hambre y la degradación ambiental en otras partes del mundo...”. También se reclamó la fundamentación científica para la aplicación de medidas paraarancelarias, que aparecen encubiertas bajo la forma de normas sanitarias, sobre todo últimamente, para los organismos genéticamente modificados.

Especial importancia, tuvo la visita del secretario de Agricultura de Estados Unidos, Dan Glickman, quien aseguró que su país “acompañará los empeños del Grupo Cairns por eliminar en el menor tiempo posible los subsidios a las exportaciones agrícolas y dar más transparencia al comercio internacional”.

La posición contraria se hizo presente también en Buenos Aires, casi para la misma fecha, en el ámbito de la Primera Cumbre Anual de Agroindustria y Alimentos organizada por “The Economist” y en la persona del francés Philip Chalmin, consejero económico de los países europeos. En su opinión, nada se va a lograr en la Ronda del Milenio en lo que hace a la agricultura, que será una discusión menor comparada con las cuestiones referidas a la industria , la tecnología, los servicios y la información; el grupo Cairns no tiene peso político alguno; el próximo milenio, a diferencia de las dos últimas décadas, conocerá una Europa que aplicará políticas económicas dirigistas; etc.

La nariz fuera del agua

En el corto plazo persiste el cuadro de sobreoferta de granos, pero con un atenuante de relevancia: el informe semanal sobre el estado de los cultivos del Departamento de Agricultura estadounidense -correspondiente a la segunda semana de setiembre- volvió a arrojar un deterioro de los cultivos de soja y maíz de Estados Unidos. Esos resultados, aunados a las perspectivas de producción granaria poco optimistas para la mayor parte de los países productores, son los que en un mercado sumamente volátil han marcado una tendencia al alza de los precios, permitiendo que la situación resulte algo menos desfavorable.

Perspectivas

En el marco de la Primera Cumbre Anual de Agroindustria y Alimentos organizada por “The Economist” tuvieron espacio otros temas vinculados al comercio internacional, además del de la Ronda del Milenio. En relación con la Argentina, la ex subsecretaria de Alimentos y Mercados, Susana Merlo, y el ex secretario de Agricultura, Marcelo Regúnaga. destacaron aspectos que afectan seriamente su competitividad, entre ellos:

Perspectivas

superposición de impuestos y existencia de tasas sin contraprestación de servicios;

complicado sistema impositivo e importantes resabios regulatorios;

necesidad de eliminar el sistema de peajes, creando nuevas alternativas;

falta de una red estratégica de frío para evitar la pérdida millonaria de productos perecederos.