Moneda y Finanzas

Situación

m Algunas buenas noticias provenientes del mercado financiero internacional, sumado al mejor desempeño local en el terreno fiscal, han alentado a las autoridades económicas a avanzar en la colocación de nuevos títulos de deuda.

m En este sentido, cabe destacar que a mediados de julio se han cubierto en más de 70% las necesidades de endeudamiento previstas para cerrar las cuentas fiscales del año.


Fuertes emisiones de deuda publica

Alentado por los acontecimientos internos e internacionales recientes, el Gobierno ha acelerado su política de colocación de bonos en la primera mitad del mes de julio.

En el orden local se destacó la recaudación impositiva de junio -aún teniendo en cuenta los efectos positivos extraordinarios procedentes de la moratoria y anticipo del impuesto a las ganancias-, que ha permitido un sobrecumplimiento de las metas fiscales.

Por otra parte, a nivel internacional, la decisión de la Reserva Federal estadounidense de no elevar las tasas de interés, ha llevado cierto respiro a las economías altamente endeudadas como la nuestra.

En este contexto, se dispuso la emisión de títulos que permitieron a la Tesorería obtener unos u$s 2.100 millones en sólo una jornada.

En el mercado local se procedió a la licitación de Letras de Tesorería (LETES) por un total de u$s 1.100 millones, divididos en tres series de acuerdo a sus plazos.

Para el término de 91 días, la tasa pactada fue de 7,52% y se recaudaron u$s 250 millones.
La colocación a 182 días fue de u$s 350 millones, a una tasa del 8,15%, lo cual implicó un aumento con respecto a la negociada un mes antes en una operación similar, que había sido de 7,99%.

Este incremento puede explicarse en principio por la restricción de fondos líquidos en el sistema financiero, que puede haber generado el adelanto del impuesto a las ganancias, la moratoria impositiva y el pago del aguinaldo por parte de las empresas.

Por último, la tercera serie colocada a 364 días totalizó u$s 500 millones, a una tasa de 8,16%.

Cabe resaltar que si bien se emitieron LETES por u$s 1.100 millones, las ofertas recibidas superaron los 4.400 millones, lo que demuestra que sigue siendo un buen negocio para las entidades financieras prestarle al sector público, en un momento en que la demanda de fondos por parte del sector productivo se encuentra aletargada.

Por otra parte, el Gobierno colocó un nuevo Bono Global a un plazo de 30 años. Si bien se emitieron u$s 1.250 millones, se recibieron efectivamente poco más de 1.000 millones, dado que el precio fijado fue de u$s 80,44.

De este modo, el bono que devenga intereses semestrales a una tasa de 10,25% anual, genera un rendimiento al inversor del 12,8% anual en dólares.

El 60% de la emisión fue colocada en el mercado local, absorbida principalmente por las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP).

Las ofertas recibidas por este título, que amortiza íntegramente al vencimiento, duplicaron el monto adjudicado.


Inversiones financieras

Las acciones líderes representadas por el índice MERVAL se convirtieron en la mejor alternativa financiera de inversión del mes de junio, al registrar un incremento de 7%.

Este aumento de los papeles privados se da en un contexto de escaso volumen de negocios, cuyo promedio mensual no despega de los $ 25 millones diarios, donde se nota fuertemente la presión compradora que ejercen las AFJP.

Este panorama de escasez de operaciones se refuerza con los importantes cambios que se vienen precipitando en las empresas cotizantes.

A fines de junio culminó la operación de canje de acciones por parte de Telefónica, cuyo nivel de aceptación fue de 92%. Cabe destacar que ésta no es la primera ni seguramente la última operación de este tipo, lo cual está cambiando radicalmente el escenario bursátil local.

En este sentido, se puede resaltar la nueva composición del índice MERVAL a partir del inicio de julio. El 30% de sus acciones participantes son representativas de empresas de origen español.

En cuanto al resto de los rendimientos financieros de junio, se destacó el Bono Global 2017 con una suba de 4,1% y el BOCON serie II en dólares, con un alza de 1,6%.

Entre los papeles de desempeño negativo en el mes, pueden mencionarse los bonos Brady, ya que la versión Par cayó 0,4% y la Descuento, 2,6%.

Con respecto a los valores acumulados al finalizar el primer semestre del año, el índice MERVAL registró una caída de 9,7%, a pesar de su buen comportamiento en junio.

De los títulos públicos, puede rescatarse el BONEX 92, con un incremento de 2%.


Perspectivas

m Al cubrir sus necesidades de financiación hasta octubre próximo, el sector público tendría la opción de retirarse parcialmente del mercado como tomador de fondos, liberando liquidez con destino potencial al sector privado de la economía, y permitiendo eventualmente una disminución de las tasas de interés.

m Con el panorama financiero relativamente despejado, puede esperarse en principio un cierto descenso del nivel de riesgo-país, al acotarse la vulnerabilidad fiscal de corto plazo.