Sector Agropecuario

Situación

 En medio del desconcierto económico-político reinante, la agricultura se vio favorecida por dos hechos concretos y un conjunto de promesas:

 La creación del llamado factor de convergencia, virtual devaluación del dólar comercial, empujó al alza las cotizaciones de granos.

 El pronóstico del USDA en relación a la soja y el maíz disparó los precios internacionales de los granos.

 Las promesas relativas a la eliminación de impuestos distorsivos y a la corrección en la forma de liquidación del IVA mejorarían -de implementarse- la rentabilidad de las explotaciones.

 La ganadería, en cambio, no logra dominar el cuadro de difusión de la aftosa y ya comienzan a percibirse los efectos depresivos sobre los precios del ganado.


Medidas para el sector

A mediados del mes de junio el gobierno adoptó un conjunto de medidas, las más importantes de las cuales son:

 Se modificó el tipo de cambio, lo que implicará un incremento de las cotizaciones internas de los productos de exportación y el encarecimiento de los insumos y bienes de capital importados.
 Se elimina el impuesto a la ganancia mínima presunta y sobre el endeudamiento del sector.
 Los saldos del IVA al 31 de mayo podrán ser utilizados para cancelar deudas o para obtener financiamiento
 Incremento del precio del gasoil por alzas en el impuesto a la transferencia de combustibles (ITC) que, aunque podrá ser descontado del IVA y de ganancias, ha sido muy criticado por el segmento de pequeños y medianos productores a los que esta posibilidad no los alcanza o les resulta insuficiente para compensar el mayor peso del ITC.
 Disminución de los peajes que para el transporte de carga alcanza al 60 %.
 Posible rebaja del IVA a los granos a alrededor del 12 % con el objeto de disminuir la evasión.

En términos generales el sector recibió con bastante satisfacción las medidas. Sin embargo, un mes más tarde de anunciadas, las quejas se hacían escuchar debido a que casi ninguna de ellas había sido reglamentada.


El precio de los granos, ¿un veranito de San Juan?

Los meses de julio para el maíz y de agosto para la soja son decisivos en relación a la suerte de estos cultivos en el hemisferio norte. Lo que suceda con el clima en los Estados Unidos, China y la Unión Europea será determinante del nivel de precios de los granos para la campaña que en la Argentina está en sus comienzos.

A principios de julio el USDA dio a conocer un informe según el cual los stocks finales de soja serían inferiores en un millón de toneladas a los del cálculo anterior. A partir de esa estimación el mercado de Chicago sufrió una disparada de precios que repercutió amplificadamente en el mercado local, con subas muy superiores a las de Chicago.

Sin embargo, se ha producido una importante brecha entre el precio del disponible y el futuro, estando el primero por encima del de Chicago y el segundo muy por debajo. Ello habla de la desconfianza de los exportadores acerca del futuro económico de la Argentina y de sus temores acerca de complicaciones en la instancia de comercialización, ya sean crediticias o de dificultades para la recuperación del IVA.

El maíz sufriría, siempre según el USDA, una merma similar en sus stocks finales (1,2 millones de toneladas). China reduciría sus exportaciones de los 5 millones de toneladas previstos, a 2 millones. Este factor sería fundamental en la tendencia al alza de los precios. Sin embargo, el panorama que se presenta más probable es el llamado "mercado climático" con alta volatilidad de precios.

La sanidad del rodeo

Finalmente se conoció el dictamen que la misión que visitó a la Argentina en el mes de mayo presentó ante el Comité Veterinario Permanente de la Unión Europea. En dicho informe se cuestiona, entre otros muchos puntos, la solidez de los sistemas de control y seguimiento de la hacienda desde sus lugares de procedencia hasta los de faena. La conclusión es que “...la fiebre aftosa no está completamente controlada en la Argentina”. Entre las recomendaciones que realiza para que se concrete la reapertura del mercado europeo se destacan las que se refieren a la adopción de un eficaz sistema de trazabilidad y la identificación y control de los frigoríficos situados en un radio de 25 km alrededor de un foco de aftosa.

La misión ha solicitado un plan de acción detallado para la lucha contra la aftosa y ha otorgado un plazo de dos meses para el cumplimiento de sus recomendaciones. De hecho, las expectativas acerca del momento de reapertura de los mercados de exportación parecen indicar que antes de que ello ocurra deberá reducirse el número de focos y completarse la segunda vacunación. Ello difícilmente ocurra antes de octubre o noviembre.

Las elevadas y todavía crecientes necesidades de vacunas han impulsado al SENASA a permitir la rehabilitación de las plantas para la producción de vacunas, dado que hasta la fecha existe un único proveedor.


Perspectivas

 En el mercado granario y en plena etapa de comercialización de la importante cosecha gruesa obtenida en la campaña 2000/01, todo depende del comportamiento del mercado climático en julio y agosto. El remanente del trigo no debería presentar dificultades para su colocación a precios aceptables.

 La ganadería podría ver profundizarse la caída de las cotizaciones tanto por la satisfacción de la demanda interna como por la profundización de la recesión que las medidas propuestas para alcanzar el déficit cero podrían significar.