Precios, Salarios y Ocupación
Situación
En el ámbito laboral, los despidos se duplicaron en agosto respecto de un año atrás, en tanto que las suspensiones aumentaron más de diez veces afectando aproximadamente a 17.200 trabajadores, principalmente del sector privado.
Persiste la tendencia decreciente de los precios
El índice de precios al consumidor de agosto bajó 0,4% respecto del mes anterior, configurando la tercera caída mensual consecutiva y la cuarta del año. Esta reiterada retracción llevó a que el acumulado en lo que va del año sea negativo en 0,6%, en tanto que la variación interanual continúa deflacionaria en 1,2%.
En el análisis desagregado se observan bajas en la mayoría
de los rubros: indumentaria (-3,3%), por liquidaciones de fin de temporada;
vivienda (-1,4%), con baja en servicios y combustible para vivienda (-3,8%);
esparcimiento (-1,2%), con una caída en turismo (-4,8%), y alimentos
y bebidas (-0,3%), con mayores bajas en frutas (-0,9%), verduras (-0,8%) y lácteos
y huevos (-0,7%). Por el contrario, se
registraron alzas en los rubros de transporte y comunicaciones (1,1%), equipamiento
del hogar (0,1%) y bienes y servicios varios (0,1%),
en tanto que gastos en salud se mantuvo sin cambios.
El índice de precios al por mayor (IPIM) registró en agosto una
disminución de 0,5% respecto del mes precedente, mientras que en los
últimos doce meses acumuló una baja de 2,5%.
En el análisis por rubros se verifica que los precios de los productos nacionales cayeron 0,5%, con baja en los productos primarios (-0,7%), en tanto que los precios de los productos manufacturados y energía eléctrica disminuyeron 0,4%.
El índice del costo de la construcción observó
en agosto una contracción de 0,8% respecto del mes anterior, la mayor
caída mensual en lo que va del año, con lo cual se extiende su
evolución deflacionaria, que en los últimos doce meses acumula
una disminución de 1,0%.
A nivel desagregado, el capítulo de mano de obra disminuyó 1,1%,
mientras que gastos generales bajó 0,7% y materiales lo hizo en 0,5%.
Aumento de la pobreza
El Observatorio Social, un emprendimiento del Ministerio de Desarrollo Social y la UNESCO, ha producido un informe que da cuenta del aumento de la pobreza en el área del Gran Buenos Aires (Ciudad de Buenos Aires y conurbano bonaerense).
En una población de 12,1 millones de habitantes, existen casi 4 millones de personas pobres, o sea, 31,5% no tiene ingresos como para adquirir una canasta básica de alimentos y servicios, constituyendo el mayor número y porcentaje de pobres desde 1991. El incremento respecto de un año atrás ha sido de 262.000 personas.
Si estos datos del área mencionada se extrapolaran a todo el país, se puede inferir que el número de pobres alcanzaría a casi 14,5 millones, equivalente a 40% de la población total (en 2000 los afectados eran un 37,7%). Cabe consignar que el INDEC considera pobre a la familia tipo (matrimonio con 2 hijos) cuyo ingreso es inferior a $ 475 por mes.
Esta situación se puede explicar por el alza del desempleo
y el subempleo, la disminución de la gente ocupada y la reducción
de casi 5%
del 30% de la población que percibe menos de $ 300 por mes.
La caída de los ingresos es un hecho que se reitera en
los últimos tres años, a consecuencia de la prolongada recesión.
En este sentido,
en mayo de 1998 el 50% de la población del área capitalina y del
conurbano tenía ingresos inferiores a $ 500 mensuales, en tanto que actualmente
el número se eleva al 60%.
Asimismo, se verifica otro fenómeno que agrava el cuadro
descripto: el aumento del tiempo en que las personas permanecen en situación
de pobreza. En los últimos dos años y proyectado para todo el
país, se observa que el 26,4% de la población permaneció
pobre durante 18 meses y más de un tercio de los hogares tuvo algún
familiar desocupado, proporción que se eleva a casi 60% en el caso de
hogares pobres.
Dentro de las conclusiones del estudio se destaca que la pobreza circunstancial está tendiendo a convertirse en pobreza permanente, lo que la transforma en un fenómeno muy difícil de revertir.
Cabe señalar históricamente que hasta mediados
de la década de 1970, la pobreza era un hecho marginal en el país
y alcanzaba a sólo 5% de los hogares; durante los años 80 se elevó
al 12% con un pico durante la hiperinflación, para descender luego en
el período del régimen
de convertibilidad hasta 1994, cuando volvió a crecer de modo sostenido.
Perspectivas