Informe Económico de Coyuntura

Nº 223 - Septiembre 2002 - AÑO 21

 MONEDA Y FINANZAS

SITUACION

La disminución del goteo del corralito -excluyendo el tema de los amparos judiciales- que se registra en las últimas semanas, indicaría que los depósitos a la vista se encuentran en un nivel cercano al necesario para efectuar las transacciones económicas.
Esta situación, sumada a la fluida oferta de divisas por parte de los exportadores, ha permitido extender el período de calma por el que transita el mercado cambiario.
Las tasas de interés presentan una tendencia decreciente, debido en gran parte a la mayor liquidez producida por el Banco Central al adquirir reservas de divisas.

Aumento de las reservas y baja de las tasas de interés

Durante las últimas semanas se viene registrando un importante descenso de las tasas de interés del mercado local.

Esto puede observarse claramente en el recorrido de la tasa implícita en las licitaciones de Letras del Banco Central (LEBAC), las que pueden catalogarse como tasas testigo para todo el sistema.

Es así que para operaciones en pesos, esta tasa de interés alcanzaba a 129,6% anual en la primera semana de julio, en tanto que a mediados de agosto se ubicaba en 75,1% anual.

Esta tendencia pudo verificarse también en las tasas del mercado de préstamos interbancarios (“call money”) y en los rendimientos de los depósitos a plazo fijo, que se ubican en casi la mitad con respecto a los valores alcanzados a principios de julio.

Uno de los motivos que explica esta caída generalizada de los tipos de interés, es la expansión de la liquidez en el mercado monetario, como resultado de la compra de divisas por parte del Banco Central.

Hasta el mes de junio inclusive, la salida de depósitos del corralito -el denominado “goteo”- se dirigía de inmediato a la compra de dólares en el mercado cambiario, lo que obligaba al Banco Central a vender sus reservas de libre disponibilidad para hacerle frente.

A partir de julio, y especialmente en la primera parte de agosto, se advierte un cambio en esta tendencia. El nivel de los depósitos en cuentas a la vista en el sistema financiero ya no desciende en la proporción en que lo hacía en los períodos anteriores, lo que puede interpretarse como que han caído casi hasta volúmenes absolutamente necesarios para realizar las transacciones diarias dentro de una economía.

Este freno del “goteo” del corralito, que implica un descenso de la demanda de dólares, sumado a la fluida oferta de divisas que vienen efectuando los exportadores, lleva a que el Banco Central adquiera las divisas excedentes, regulando el mercado cambiario e incrementando sus reservas de divisas de libre disponibilidad.

Cabe consignar que en las últimas seis semanas -hasta mediados de agosto- la autoridad monetaria adquirió unos u$s 350 millones, generando así liquidez en el mercado por unos $ 1.250 millones.

Evolución del programa monetario

El comportamiento de las variables monetarias durante el mes de julio permite observar -además de lo señalado en el punto anterior- una drástica caída de las necesidades de fondeo por parte de las entidades financieras.

Los bancos necesitaron unos $ 320 millones durante ese período, los que fueron cubiertos con sus reservas de liquidez y con la asistencia de la autoridad monetaria.

Cabe destacar, por otra parte, que la colocación de LEBAC, ha implicado una contracción de la base monetaria del orden de los $ 300 millones.

Debuta el INDOL

En un contexto de relativa calma en el mercado cambiario, con la cotización del dólar oscilando alrededor de $ 3,60 y con adquisiciones por parte del Banco Central que impedían su descenso, hizo su aparición pública el índice de dólar a futuro (INDOL).

Con la creación de este indicador, el mercado intenta atemperar el riesgo cambiario de operaciones de comercio exterior (exportaciones e importaciones), financieras (tanto para colocadores como para tomadores de fondos) y de inversión.

En su debut, a mediados de agosto, este índice marcó una cotización del dólar de $ 3,68 para fin de agosto y de $ 3,82 para fin de setiembre.

PERSPECTIVAS

El acuerdo con el FMI se encuentra más cercano, aunque aún se mantienen cuestiones fundamentales a resolver como las restricciones al retiro de los depósitos, la autonomía del BCRA y la reestructuración del sistema financiero.
En espera de una resolución judicial con respecto al tema del corralito, las autoridades se hallan preparando un nuevo canje optativo por bonos.