Informe Económico de Coyuntura

Nº 232 - Julio 2003 - AÑO 22

 MONEDA Y FINANZAS

SITUACION

La curva de crecimiento de los depósitos a plazo fijo tiende a aplanarse como contrapartida del continuo descenso de las tasas de interés y a pesar del incremento de la cantidad de pesos en circulación debido a las intervenciones del Banco Central en el mercado cambiario.
La escasez de financiación bancaria y sus elevadas tasas de interés en términos reales, tornan más lenta la recuperación de diversos sectores productivos de la economía.

Desaceleración de los depósitos y baja de las tasas de interés

A principios de junio los depósitos totales en el sistema financiero se acercaban a los $ 75.000 millones.

De ese monto global, alrededor de la mitad está constituído por depósitos a plazo fijo, los que en las últimas semanas han mostrado una tendencia a atenuar su tasa de crecimiento.

Es así que mientras en enero se ubicaban en el orden de los $ 32.500 millones y en marzo alcanzaban los 35.700 millones, a comienzos de junio parecían encontrar una meseta en los 38.700 millones.

Cabe destacar que dentro de este total se encuentran las imposiciones obligatorias a 90 y 120 días de plazo que debieron efectuar los ahorristas que decidieron desprogramar sus depósitos “acorralados” con montos en origen que superaban los $ 42.000 y 100.000, respectivamente.

La apertura del denominado “corralón”, que finalizó en la última semana de mayo, dejó como saldo que algo más de 50% de los Certificados de Depósitos Reprogramados (CEDRO) no fueron desactivados.

El crecimiento de los depósitos totales se explica por el mayor nivel de monetización que viene mostrando la economía en los últimos meses, impulsada por la emisión monetaria que realiza el Banco Central con el objetivo de intervenir -casi diariamente- en el mercado cambiario para evitar un descenso aún mayor de la cotización de la divisa norteamericana.

Sólo en la primera semana de junio, las compras del BCRA alcanzaron los u$s 329 millones, por los cuales debió entregar unos $ 900 millones.

De este modo, la base monetaria ampliada (que incluye las denominadas “cuasimonedas”) se ubicaba en ese momento en los $ 40.900 millones.

Con respecto a la evolución más tranquila de los depósitos a plazo fijo, la misma puede interpretarse como una especie de resistencia, por parte de los ahorristas, a aceptar tasas de interés cada vez más bajas por la colocación de sus fondos.

El rendimiento promedio para depósitos de entre 7 y 59 días de plazo, que se ubicaba en 20% anual en marzo último, caía a 10% a comienzos de junio, aunque las entidades financieras premian con una sobretasa las colocaciones a más largo plazo.

Una caída similar se verifica en las tasas que surgen de las distintas licitaciones de Letras del Banco Central (LEBAC). A 30 días de plazo, descendieron un punto, a 5,9% anual en el último mes, en tanto que a 60 días cayeron dos puntos porcentuales, ubicándose en 6,6%.

Continúa la reducción de los préstamos bancarios

A pesar del incremento observado en los depósitos totales del sistema financiero, los bancos siguen reduciendo en cierta medida su cartera crediticia. El stock de préstamos totales ha caído unos $ 12.000 millones desde la crisis que implicó la salida de la convertibilidad.

Este tema ha generado algunas rispideces entre las autoridades económicas y los banqueros.

El mercado crediticio se encuentra afectado tanto por el lado de la oferta, como por el de la demanda. Muchas entidades financieras atraviesan agudos problemas de liquidez -en especial buena parte de la banca pública- y aún deben resolver el problema de los adelantos y redescuentos otorgados oportunamente por el Banco Central.

Otros bancos, en cambio, si bien presentan una mejor situación en términos de liquidez, no conocen bien su situación en cuanto a la solvencia de mediano y largo plazo, debido a que aún quedan por resolver temas muy importantes como las compensaciones que reclaman por la pesificación e indexación asimétrica de depósitos y préstamos y por los pagos efectuados a ahorristas con amparos judiciales.

En este contexto, cabe destacar que ha sido creada la Unidad de Reestructuración del Sistema Financiero, comisión integrada por miembros nombrados por el Ministerio de Economía y por el Banco Central.

Por el lado de la demanda, el mercado de préstamos se ve afectado por el aún elevado nivel de las tasas de interés activas, que superan la rentabilidad esperada de gran parte de las actividades productivas.

PERSPECTIVAS

Las autoridades seguirán avanzando hacia la resolución de los temas pendientes, con el fin de hacer transparente la situación en que se encuentra el sistema financiero.
Ese es uno de los requisitos para llegar a desarrollar un mercado crediticio sólido, adecuado a las necesidades de la producción y el consumo y a las posibilidades de pago de personas y empresas.