Informe Económico de Coyuntura

Nº 252 - Mayo 2005 - AÑO 23

 MONEDA Y FINANZAS

SITUACION

Dos decisiones tomadas en el exterior complican el panorama local. Un juez de Estados Unidos frenó el canje de la deuda en default y, por otro lado, la Reserva Federal de ese país aumentó la tasa de interés de referencia internacional.
Se debate acerca del protagonismo de la política monetaria y cambiaria vigente con respecto al alza de precios de los últimos meses.

Vulnerabilidad externa

Dos decisiones tomadas en Estados Unidos en los últimos tiempos demuestran claramente la fuerte vulnerabilidad externa de una economía emergente y altamente endeudada, como la nuestra en un mercado globalizado.

Por un lado, un juez federal de Nueva York dispuso mantener un embargo de títulos en cesación de pagos argentinos, en condiciones de ser canjeados, por u$s 7.000 millones de valor nominal. Todo esto a pedido de un "fondo buitre", según la jerga financiera, y a la espera de una resolución de la Corte de Apelaciones de ese estado norteamericano.

Debido a este acontecimiento, las autoridades argentinas debieron postergar la entrega de los nuevos bonos que reemplazarán a los títulos en default que aceptaron la propuesta de canje y que representan 76,15% del total.

Además, debió suspenderse el pago de intereses acumulados, que suman u$s 678 millones y que iba a realizarse el 1º de abril último.

Por otra parte, otra decisión externa que complica a nuestra economía fue la adoptada por la Reserva Federal de EE.UU. al disponer una nueva suba en la tasa de interés de corto plazo. No por esperado y anunciado, este aumento ha tenido menos efecto sobre nuestras finanzas.

Esta tasa de interés se encontraba en 1% anual a mediados de 2004 y ha registrado incrementos sucesivos hasta alcanzar, en marzo último, el nivel de 2,75%.

Pero lo más importante, a los efectos de su incidencia internacional, es que esta suba ha provocado un alza de la tasa de interés implícita de los Bonos del Tesoro de EE.UU. a 10 años, la cual alcanzó a 4,65% anual.

De este modo, la economía norteamericana absorbe una mayor cantidad de capital financiero mundial y disminuye los fondos excedentes con destino a los mercados emergentes.

Repercusión local

Las decisiones descriptas han afectado de diversas maneras las finanzas locales. Además de frenar el proceso de canje de la deuda en cesación de pagos, la decisión del juez de EE.UU. provocó una caída de 10% en la cotización de los títulos post-default.

Los anuncios de la Reserva Federal se hicieron sentir en todas las alternativas de inversión financiera. Así es que al finalizar el mes de marzo, el índice MERVAL -representativo de las acciones líderes- había caído a 1.400 puntos (10,15%), habiendo llegado a los 1.350. En tanto, los bonos públicos BODEN 2013 y 2012 habían descendido 9% y 5% respectivamente.

Medidas del Banco Central

El incremento registrado por el Indice de Precios al Consumidor (IPC) en el primer trimestre del año, acumulando 4%, hace peligrar lo pautado en el Presupuesto 2005 y las previsiones del Banco Central.

Diversas fueron las causas esgrimidas en los distintos análisis. Escasez relativa de oferta de bienes y servicios, demanda excedente y puja distributiva, fueron algunas de las mencionadas.

Cuando se hace hincapié en la presión de la demanda en el mercado como factor explicativo del aumento de precios, inmediatamente se hace referencia no sólo a la política salarial del Gobierno sino también a la política monetaria y cambiaria del Banco Central.

Más allá de poner en duda que ésta haya sido la principal causa de inflación, es cierto que tanto la política monetaria como -y especialmente- la cambiaria desarrolladas en el último tramo de 2004 fueron expansivas en términos de liquidez.

Con el objetivo de no dejar caer la cotización del dólar, el Banco Central compró unos u$s 2.000 millones en el mes de diciembre, con su correlato en un incremento de la emisión de pesos.

A comienzos de 2005, la autoridad monetaria ya había adoptado ciertas medidas de absorción monetaria que llevaron a que la base monetaria ampliada (circulante más encaje de los bancos) se redujera en unos $ 2.300 millones durante el primer trimestre.

Esto se vio claramente reflejado en la menor intervención del Banco Central en el mercado cambiario, ya que adquirió sólo u$s 150 millones en marzo, cediendo su lugar al Banco Nación, que compra con recursos fiscales.

La intención del BCRA es profundizar esta astringencia monetaria a lo largo del segundo trimestre del año, recurriendo a algunos instrumentos, entre los que se destacan:

menor intervención en el mercado de cambios, en línea con lo realizado en el primer trimestre;

nuevas emisiones de Letras del Banco Central (LEBAC), aumentando la tasa de interés de estos títulos en las próximas licitaciones;

promover la cancelación anticipada de redescuentos por parte de los bancos, y

alentar a los bancos a que suban las tasas de interés para los depósitos a plazo fijo, para captar circulante en poder del público y paralelamente, promover las colocaciones a más largo plazo para evitar un descalce con la duración de los préstamos.

PERSPECTIVAS

El Fondo Monetario Internacional continuará presionando por la reapertura del canje de la deuda, por lo que renace la incertidumbre acerca de la probabilidad de alcanzar un acuerdo con el organismo financiero en el corto plazo.
El Banco Central aplicará una serie de medidas para contener expectativas inflacionarias, donde deberá priorizar algunos objetivos por sobre otros que aparecen como contrapuestos.