Informe Económico de Coyuntura

Nº 260 - Enero 2006 - AÑO 24

 MONEDA Y FINANZAS

SITUACION

El recambio ministerial generó cierta incertidumbre en el mercado financiero, lo cual quedó demostrado a partir del comportamiento de las cotizaciones de bonos y acciones y del tipo de cambio.
Las primeras señales emitidas por la nueva conducción económica, en este terreno, indican que se hará hincapié en la continuidad del proceso de crecimiento, no recurriendo a un aumento de la tasa de interés como elemento antiinflacionario.

Nueva conducción

Transcurrido poco más de un mes desde las elecciones parlamentarias, el Presidente decidió un cambio en el equipo económico. El recambio generó algunas dudas entre los analistas tanto económicos como políticos, lo cual, en el terreno de los mercados financieros se tradujo en una serie de vaivenes en las cotizaciones de las distintas alternativas de inversión.

Es así que el índice MERVAL, representativo del panel de acciones líderes, cayó en ese momento 4,5%, en tanto que los bonos públicos que más bajaron fueron el Descuento en pesos, de largo plazo, que lo hizo en 2,6%, mientras que un bono corto como el BODEN 2008 perdió sólo 0,6%.

En paralelo, y debido a la incertidumbre de cortísimo plazo, la cotización del dólar subió algunos centavos hasta ubicarse en los $ 3,02, con un alza de 1%.

Cabe destacar que en cuanto la nueva conducción económica ratificó las principales líneas del esquema vigente, las dudas comenzaron a disiparse y los mercados se tranquilizaron, aunque, especialmente en el de los papeles de empresas privadas, no pudieran recuperar los valores previos al cimbronazo.

De este modo, el índice MERVAL cerró noviembre con un nivel de 1.554 puntos, lo que implica una caída de 3,4% en el mes.

El dólar cerró el período a $ 2,99 con el Banco Central nuevamente interviniendo con sus compras y los bonos recuperando el terreno que habían perdido.

Además, cabe mencionar que hacia fines de noviembre comenzaron a cotizar, en el mercado bursátil, los cupones de los bonos emitidos con motivo del canje de la deuda pública.

Estos cupones están atados a la evolución del Producto Interno Bruto (PIB), y hasta ese momento su valor estaba incluido en la cotización del bono principal: Par, Descuento y cuasi Par.

Política monetaria

Además de los anuncios realizados por la nueva conducción económica en cuanto al mantenimiento de los principales lineamientos de política, se emitieron algunas señales importantes en cuestiones que comenzaban a estar en debate en el mercado financiero.

Algunos sectores habían comenzado a reclamar la necesidad de aumentar las tasas de interés para lograr un cierto enfriamiento de la economía que permita, a su vez, lograr mejores resultados en la lucha contra el proceso inflacionario. Este argumento habría comenzado a ser considerado por el anterior equipo económico y era motivo de debate y preocupación en el más alto nivel político.

Apenas asumida la nueva conducción, el Banco Central dio a conocer una serie de decisiones que irían a contramano de la intención de elevar las tasas de interés como factor antiinflacionario.

Por un lado, la autoridad monetaria dispuso una reducción de los encajes bancarios de 1 punto para las cuentas a la vista y de 2 puntos para los depósitos a plazo. Esto implica la liberación de unos $ 1.600 millones.

Además, y en el mismo sentido, el BCRA decidió permitir a las entidades financieras, el cálculo trimestral (diciembre – febrero) del efectivo mínimo, licuando de este modo la incidencia de los cálculos estacionales del último mes del año.

Paralelamente, y con el fin de ofrecerles a los bancos una alternativa rentable de colocación de parte de esos $ 1.600 millones liberados a través de la baja de los encajes, el Banco Central dispuso un incremento de medio punto en la tasa de interés con la que remunera los pases pasivos. Le pagará a las entidades financieras una tasa de 4,5% por colocaciones a un día de plazo y 5% por depósitos a 7 días.

Nueva línea de préstamos

En la primera semana de diciembre se anunció una nueva línea de créditos del Banco Nación por un total de $ 4.500 millones o u$s 1.500 millones.

Estos préstamos, que estarían vigentes a partir de enero de 2006, se destinarán a financiar inversiones productivas, intentando de esta manera acrecentar la oferta de bienes de la economía.

El plazo para el repago será de hasta 10 años y la tasa de interés prevista, que contaría con algún subsidio, se ubicaría entre 15,5% y 17,5% en pesos y entre 8,5% y 13% en dólares.

PERSPECTIVAS

La nueva conducción económica intentará no recurrir a un aumento del nivel de tasas de interés que provoque una desaceleración del proceso de crecimiento económico.
De verificarse una continuidad de los actuales indicadores inflacionarios, los instrumentos financieros que ajusten su valor según la evolución del CER, seguirán siendo demandados.